No importa si eres profesor de Yoga o Rebirthing.
No importa si eres Coach espiritual.
No importa si eres maestro de Reiki.
No importa si eres experto angeólogo.
No importa si eres tethahealer y vas al 7º plano.
No importa si eres CP3 en bioneuroemoción.
No importa si eres practitioner en PNL.
No importa si eres especialista en registros akhásicos.
No importa si eres facilitador del Perdón o seguidor del Advaita Vedanta.
No importa si viajas al astral.
No importa si eres canalizador siriano, pleyadiano o arcturiano.
No importa si resuenas con Brahman, Buda, Alá, Yahvé o Jesús.
O si vives el amor como Shiva y Shakti.
Y, por supuesto, no importa si no eres o sientes nada de lo anterior.
Todo es perfecto, si el primer viaje de todos lo has hecho a tu interior.
Y si todo lo que estás entregando ha sido re-conocido en tu interior.
Y si eres honesto de entender que maestro y aprendiz son lo mismo.
Que víctima y verdugo son lo mismo.
Que todo es lo mismo :TÚ.
Potencial Infinito. Sin niveles. Sin Fin.
Si, en definitiva, eres consciente de que todo lo que experimentas es una permanente invitación a abandonar las ilusiones. A despertar de un sueño.
Si entiendes eso, estás en el camino de vuelta. Ya sabes quién eres. Sonríe.
De mi amigo, Félix J. Melián
Por Alvaro Moya Sandoval